La importancia del autocontrol en niños con dificultades de aprendizaje y de atención
Por Lexi Walters Wright
De un vistazo
- El autocontrol es una destreza social que regula nuestra conducta, emociones e impulsos.
- A medida que crecemos, nuestro autocontrol tiende a mejorar. Pero los niños que tienen dificultades de aprendizaje y de atención pueden tener problemas para controlarse.
- La dificultad para controlarse puede ser un obstáculo para que un niño se integre y haga amigos.
Imagínese estar invitado a cenar en casa de alguien y agarrar el salero de la mesa antes que nadie. Y luego, cuando el anfitrión pregunte cómo está la comida, decirle que no tiene mucho sabor.
No poder controlar los impulsos puede generar momentos sociales incómodos. Y para los niños que tienen dificultades de aprendizaje y atención, los problemas con el control de sus impulsos pueden ser un gran obstáculo para hacer amistades.
¿Qué es el autocontrol?
Cuando reflexionamos sobre las consecuencias de nuestras decisiones y luegodecidimos qué hacer o decir, estamos ejerciendo el autocontrol. Es una habilidad social clave que nos permite regular nuestro comportamiento, emociones e impulsos. El autocontrol es lo que nos detiene de hablar en el cine durante la película o decir de repente que no nos gusta el nuevo peinado de alguien.
Ejercemos el autocontrol durante las actividades diarias como al esperar el autobús o nuestro turno para hablar en una conversación. Quizá ni siquiera nos damos cuenta que lo estamos haciendo, pero todos se darían cuenta si no lo hiciéramos. Estaríamos empujando a todo el mundo para llegar al principio de la fila y hablaríamos sin parar. Nuestros actos parecerían impulsivos y desatentos. Nuestra conducta parecería extrema e inapropiada.
Para la mayoría de los niños el camino hacia el autocontrol comienza a temprana edad y continúa hasta los veinte años. A medida que crecen, serán más capaces de:
- Esperar por las cosas que quieren sin hacer un berrinche
- Anticipar lo que sucederá si dicen o no dicen, si hacen o no hacen algo
- Manejar su enojo o frustración sin arrebatos emocionales
- Evitar peleas
- Ponerse una meta y hacer un plan paso a paso para lograrlo
- Reflexionar cómo su conducta afecta a los demás y hacer cambios basados en esas reflexiones
Algunos niños con ciertas dificultades de aprendizaje y de atención tienen dificultad para controlar sus impulsos. No son impulsivos a propósito. Simplemente no han desarrollado la capacidad de controlar sus impulsos que los otros niños sí han desarrollado. Tener problemas para controlarse es uno de los síntomas principales del TDAH y las dificultades del funcionamiento ejecutivo.
Cómo las dificultades con el autocontrol afectan la socialización
Hay tres tipos de dificultades con el autocontrol: dificultad para controlar los impulsos, dificultad para controlar las emociones y dificultad para controlar el movimiento. Cada una de ellas puede afectar la vida social de su hijo de diferentes maneras.
Si su hijo tiene dificultad para controlar los impulsos puede que:
- Interrumpa constantemente
- Hable mucho
- No espere su turno para hablar
Si su hijo tiene dificultad para controlar las emociones puede que:
- Se frustre fácilmente y se dé por vencido rápidamente
- Sea incapaz de tolerar correcciones o críticas
- Tenga berrinches o crisis emocionales durante más tiempo que sus compañeros
Si su hijo tiene dificultad para controlar el movimiento puede que:
- Sea demasiado activo o inquieto
- Se retuerza o mueva sus manos y/o pies constantemente
- Tenga problemas con las actividades que requieren permanecer sentado o callado
- Tenga dificultad para esperar su turno
- Interrumpa los juegos y las conversaciones
Cómo las dificultades con el autocontrol afectan el aprendizaje
Si su hijo tiene problemas para calmarse, quedarse quieto y esperar su turno para hablar, ¡imagínese lo que es su vida en la escuela! Todos los días se espera que permanezca sentado y en silencio mientras el maestro enseña la lección. ¿Pero cómo va a poder lograrlo? Cuando los niños tienen problemas de autocontrol, puede que les sea muy difícil integrarse y comportarse apropiadamente en situaciones académicas. Y esto a su vez obstaculiza el aprendizaje.
Tener dificultad para controlarse puede llamar la atención de manera negativa hacia su hijo. El maestro puede que tenga que interrumpir la lección para llamarle la atención por su comportamiento. Los compañeros de clase pueden molestarse con su hijo por requerir tanta atención.
Su hijo podría sentirse frustrado o avergonzado. Y toda la distracción que se genera puede causar que se retrase en la lección que estaba tratando de aprender.
Los problemas con el autocontrol pueden dificultar que su hijo se integre y haga amigos. Por suerte, usted puede ayudar a su hijo a adquirir autocontrol. Existen diferentes estrategias que puede intentar con su hijo en primaria, escuela intermedia y bachillerato. También puede encontrar consejos específicos de expertos en Entrenamiento para padres.
Puntos clave
- El control de los impulsos, de las emociones y del movimiento son componentes importantes del autocontrol.
- Cuando los niños tienen dificultades con el autocontrol, puede que les sea difícil integrarse y comportarse apropiadamente en la escuela. Esto puede ser un obstáculo para aprender.
- Usted puede ayudar a su hijo a practicar estrategias para adquirir autocontrol.