Por qué algunos niños se excitan demasiado

Por Kate Kelly

De un vistazo

  • Es típico que los niños pequeños se exciten demasiado.
  • Algunos niños tardan más tiempo en desarrollar el autocontrol.
  • Los niños que se excitan o se emocionan en exceso podrían ser acosados o excluidos por otros niños.

Si alguna vez ha estado en la fiesta de cumpleaños de un niño de 4 años, sabe que los niños pequeños se excitan mucho. Corren, gritan y empujan sin poder evitarlo.

Usted no observa ese comportamiento en la fiesta de un niño de 10 años. Sin embargo, algunos tienen dificultad para controlar su excitación incluso a esa edad. Hablan en voz alta o insisten en que todos participen en un juego específico porque es divertido jugarlo en grupo. En ocasiones los otros niños aceptan ese comportamiento, pero con frecuencia no es así.

Si su hijo se sobreexcita y usted se pregunta cuál es el motivo, averigüe más.

Qué causa que los niños se exciten demasiado

Los niños necesitan autocontrol para manejar su excitación. No todos desarrollan esta habilidad con la misma rapidez, y en los primeros años puede haber una gran diferencia en el dominio de esta destreza.

Algunos niños son excitables por naturaleza, y esto no es necesariamente algo negativo. A menudo son curiosos, energéticos, optimistas y divertidos, y a los otros niños les gusta estar cerca de ellos.

Pero solo hasta cierto punto. Si se exaltan demasiado y dicen o hacen cosas más allá de cierto límite, puede tener el efecto contrario. Otros niños podrían pensar que son “molestos” o puede que se “avergüencen” de estar cerca de ellos y los excluyan. Puede que se burlen de ellos o los acosen porque actúan de manera diferente.

Exaltarse puede causar que los niños se pasen de la raya. Eso se evidencia de manera diferente en diversas situaciones. A continuación algunos ejemplos:

    • Ir a comprar helado es “lo mejor que ha pasado en la vida”, y hablan demasiado alto de los diferentes sabores mientras esperan para ordenar.
    • En el aula, cuando saben la respuesta no pueden esperar que el maestro les pregunte directamente. Alzan la mano y llaman al maestro repetidamente para que les pregunten, aun cuando otro niño esté hablando.
    • Quedan tan atrapados en el juego de perseguir a otros que empiezan a ser bruscos con los otros niños, incluso después de que les piden que se detengan.

Los niños que se sobreexcitan pueden:

    • Precipitarse con excesivo entusiasmo ante las cosas.
    • Acaparar las conversaciones.
    • Hablar de algo sin parar.
    • Interrumpir a las personas y hablar sin esperar su turno.
    • Tener dificultad para respetar el espacio personal de las personas.
    • Ser confiado y optimista de manera exagerada.
    • Ser poco realista en cuanto a sus talentos y habilidades.
    • Reaccionar exageradamente a eventos buenos y malos.

Existen varias razones de por qué los niños tienen problemas para contener su excitación. En algunos, es simplemente su naturaleza. En otros, el motivo de la sobreexcitación es el TDAH. Los niños con TDAH a menudo tienen dificultad con el autocontrol y para cambiar de una situación a otra. Conozca otros signos del TDAH, y comuníquese con el médico o el maestro de su hijo si se siente preocupado.

Algunos niños tienen problemas con el procesamiento sensorial. Se sienten sobrecargados por la información captada por sus sentidos. Aprenda sobre la sobrecarga sensorial.

Cómo ayudar a su hijo a controlar su excitación

Sin importar cuál sea la causa de que su hijo se excite demasiado, existen maneras en que usted puede ayudar.

Empiece por celebrar todas las fortalezas que derivan de la sobreexcitación de su hijo, como su entusiasmo y su energía. Son parte de lo que hace que su hijo sea maravilloso.

Después, trabaje en estrategias que lo ayuden a controlar su excitación. Primero, dese cuenta de cuáles son los detonantes y en qué situaciones se sobreexcita. Una vez que lo sepa, puede ayudarlo a prepararse para esas situaciones. El juego de roles es una manera excelente de hacerlo.

A continuación, decida con su hijo un gesto o una palabra secreta que usted pueda usar para hacerle saber que debe tranquilizarse. Por ejemplo, puede usar esa señal para recordarle que el volumen de voz que usa cuando está afuera es diferente al que debe usar cuando está en un espacio cerrado.

Conozca otras recomendaciones para ayudar a los preescolares, a los estudiantes de primaria y a los adolescentes y preadolescentes. También puede aprender sobre apps que ayuden a niños pequeños y a niños mayores a desarrollar autocontrol.

Puntos clave

  • Algunos niños se excitan con facilidad de manera natural y puede que necesiten ayuda para controlarse.
  • Use estrategias como jugar a los roles para ayudar a su hijo a controlar su entusiasmo.
  • Recuérdele el lado positivo de la sobreexcitación, como tener energía y entusiasmo.

Acerca del autor

Kate Kelly ha estado escribiendo y editando por más de 20 años, enfocándose en cuidado parental.

Revisado por

Molly Algermissen, Ph.D., es profesora asociada de psicología médica en Columbia University Medical Center y directora clínica de PROMISE.

 

 

 

 

 

Original aquí

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